Fue Marvin Ceballos, a nueve minutos del pitazo final, el que marcó el gol más esperado por 14 millones de guatemaltecos y que sentenció el triunfo 1-0 sobre los croatas, en la última jornada del Grupo F del certamen, que se juega en Colombia.
El resultado dio al combinado guatemalteco sus primeros tres puntos en una justa mundialista y le sirvieron para sellar su clasificación a los octavos de final, en los que Portugal será su próximo rival, el martes 9 de agosto, en Cali.
No existen muchos adjetivos para definir lo conseguido anoche por los jugadores nacionales, que escogieron el lugar y el mejor momento para jugar como no lo habían hecho en los partidos anteriores, contra Nigeria (0-5) y Arabia Saudita (6-0).
Armenia, conocida como la Ciudad Milagro, fue escenario de eso mismo, un milagro que convirtió al combinado azul y blanco en uno de los 16 mejores del planeta para la categoría.
Ida y vuelta
El partido que definía el futuro nacional en el Mundial fue jugado con gran voluntad por los once que Ever Almeida escogió para empezar el partido.
El portero Mynor Padilla, Ceballos y Manuel Moreno fueron los mejores de la primera mitad, en la que la bicolor solo alcanzó a inquietar al portero Delac, al minuto 23, cuando Gerson Lima no alcanzó a tocar el balón dentro del área luego de un fallo en la zaga rival.
Sin duda, lo mejor vino en la segunda parte, cuando Almeida hizo ingresar a Abner Bonilla, en lugar se Kevin Norales, después del descanso.
Apenas dos minutos pasaban de la primera parte, cuando Bonilla cabeceó al poste un servicio de Ceballos, desde la banda derecha, en la que en ese momento fue la llegada más clara de todo el partido.
La presión impresa por los guatemaltecos hizo reaccionar al cuadro rival, que tenía en sus filas con jugadores de mayor estatura y corpulencia.
Padilla se convirtió en figura clave al desviar, al 53, un remate de Puncec que casi se iba a las redes.
Guatemala volvió a avisar, al 66, cuando Moreno cabeceó, pero Delac contuvo el balón por delante de la línea de gol.
El partido tomó otro ritmo y, apenas un dos minutos después, Padilla volvió a interponerse, para evitar que el tiro de Ticinovic perforara su portería.
Las llegadas de Ceballos, quien remató a un costado del poste y luego un cabezazo de Moreno, en un tiro de esquina que tuvo el mismo destino, a los 71 y 75, fueron la muestra que el dominio nacional fue creciendo progresivamente.
Cuando faltaban nueve para que el qatarí Abdulrahman Abdou silbara el final, llegó el momento de gloria.
La jugada nació en las manos de Padilla, que desde su área envió un largo despeje, el cual dejó mal parada a la zaga contraria y llegó hasta el área pequeña.
En el rebote, Puncec no alcanzó a dominar ni despejar el esférico, lo cual fue aprovechado por Ceballos, quien en un preciso toque de derecha anticipó la salida de Delac y envió la pelota al fondo.
Fue una explosión de alegría para el volante, quien se quitó la camisola y fue cubierto por sus compañeros en una montaña humana, mientras que más de dos mil guatemaltecos, en las gradas, celebraron el triunfo más esperado por todos.
fuente:prensalibre.com
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